El nombre surgió en 2015 por consenso: Radio Comunitaria La Montonera era una declaración de principios, era lucha, resistencia.
“En Jáchal tenemos mucho contacto con La Rioja, con Valle Fértil, Huaco, Mogna, y todo era ruta de tránsito de las montoneras, entonces sumado a la territorialidad, el nombre lo tomamos por su sentido de lucha contra de las injusticias.
Las montoneras eran donde estaban los perseguidos, pero a su vez ellos protegían a su comunidad. Ese es el sentido que le quisimos dar a la radio”, dijo Fabián Olivares, uno de sus fundadores.
Además, la Asamblea Rural a la que pertenecen está integrada por muchas mujeres y el nombre le daba un lugar preponderante a lo femenino en esta construcción comunitaria.
FM 102.9, La Montonera, fue gestionada por la Asociación Civil Quillay que venía trabajando de manera articulada con el INTA y la Secretaría de Agricultura Familiar; nació el 7 de diciembre del 2015.
Quillay, INTA y Secretaria de Agricultura, ya venían trabajando en las trayectorias de las distintas localidades de la agricultura familiar, en los trabajos que ellos venían desarrollando. Se trabajaba en los ejes: educación, infraestructura, comunicación y producción. Dentro del eje comunicacional se sacó un boletín que reflejaba todos esos trabajos.

Eran épocas en las que hacían un programa en Radio Nacional Jáchal donde transmitían la información de los trabajos de territorio porque necesitaban visibilizar el sector y el trabajo de las familias.
Por entonces, la ley de Medios posibilita bajar una radio comunitaria para asociaciones civiles sin fines de lucro y gracias a eso pudieron acceder a una frecuencia, “era la oportunidad de democratizar la comunicación y era la forma de visibilizar la tarea rural”.
“Empezamos a aprender a gestionar una radio, sus contenidos, en un contexto complejo porque en el 2015 se produce el derrame en la mina Veladero, de Barrick, y todo eso era parte del eje editorial de la radio y de la Asociación porque tenía que ver con la producción, agricultura, animales de granja, y muchas familias ya estaban organizadas en asambleas. Eso era parte de lo que se quería visibilizar”, dijo Olivares.

De forma paralela se ponía el foco en la soberanía alimentaria, turismo rural, se realizaron circuitos de turismo rural y se compartían los saberes cotidianos de las familias de las distintas localidades de Jáchal.
Todo se aprendía sobre la marcha, transitando el camino de radio comunitaria, trabajando en el armado del contenido, organizando lo cotidiano de las familias.
“Ellos tienen ahora, por ejemplo, una feria franca y salimos todos los viernes con la promoción de la feria. Realizamos también varios spot sobre soberanía alimentaria que se refiere a lo que comemos y cómo lo comemos. La radio sirvió para visibilizar el sector, era algo muy necesario”.
La radio les daba un espacio libre, y en una zona rural fue el medio ideal, les dio la oportunidad de mostrar sus saberes, sus tareas cotidianas.

“Cuando ocurrió el derrame en la mina ningún medio acá podía hablar sobre las preocupaciones que había respecto al agua, no se abría el micrófono a esa problemática, y nosotros, como no recibíamos pautas de nadie, pudimos visibilizar el tema, hacer nuestros planteos, decir lo que queríamos, manifestar nuestras preocupaciones”, contó Olivares.
Fue la radio comunitaria la que les dio esa posibilidad y a través de ella se pudo democratizar el mensaje.
-¿Cómo fue respondiendo la audiencia?
-Fuimos haciendo un caminito de hormiga con la audiencia porque además era todo autogestión y autoadministración, era todo a pulmón entre los que conformamos esta emisora. Fuimos instalando temas y sosteniendo la radio con esa dinámica de radio comunitaria, con accesibilidad, democratización del mensaje y pluralidad de voces.

Hoy La Montonera tiene un camino recorrido de 10 años y si bien no son primeros en audiencia del departamento, si tienen una audiencia fiel, interesada en lo que esta radio tiene para decir. “La gente confía en nosotros, sabe que no decimos cosas que no son, no manipulamos nada y propiciamos el pensamiento crítico”.
Sus temas principales siguen siendo la producción primaria de Jáchal y la atención a los megaproyectos mineros, “porque terminan afectando a los productores”.
En La Montonera trabajan 10 personas a las que la radio no les paga sueldos, son todos trabajadores voluntarios, es el compromiso que vienen sosteniendo, es parte de su lucha.
“La pauta es ínfima, a veces no nos alcanza ni para pagar la boleta de energía, por ejemplo, contamos con auspicio de la municipalidad y el apoyo de algunos comerciantes de Jáchal; seguimos siempre buscando gente que apoye a esta radio comunitaria económicamente, pero siempre con la premisa de que la línea editorial no se toca, porque la existencia de La Montonera tiene como base justamente sus fuertes principios”.
La radio pertenece al colectivo de radios comunitarias de San Juan y de Cuyo, hay entre ellas conexiones semanales, reuniones y más. En este entramado de construcción comunitaria, La Montonera cumple 10 años en diciembre y habrá festejos.
