La increíble historia de María Mush, el ente que habita en Niquivil
Los niños la ven, los adultos sólo pueden escucharla. Los relatos de un pueblo jachallero que siguen cautivando a grandes y chicos.
Los niños la ven, los adultos sólo pueden escucharla. Los relatos de un pueblo jachallero que siguen cautivando a grandes y chicos.
“La Flor de la mafia” era hija de un capo mafioso de Rosario, provincia de Santa Fe. Sus últimos días fueron como comerciante en la Ciudad de San Juan.
Nuestros pueblos originarios nos dejaron este sistema de cocción que aún se sigue usando. Su sabor es único.
Un cuento que nos remonta a los tiempos de la conquista, cuando aún los nativos dominaban las tierras de Valle Fértil.
Nació en San Juan Capital, pero pasó gran parte de su infancia en Jáchal. Su adolescencia estuvo marcada por un barrio lleno de músicos de la talla de Villavicencio, Tejada y Berenguer.
Su origen se atribuye al quechua, pero también tiene raíces árabes. La palabra se convirtió en símbolo de la sanjuaninidad y abunda en memes.
Comenzaron a circular en San Juan cuando los medios de transporte eran sulkys y break. Ellas se animaron, Destino San Juan las rescata.
Una artista jachallera muy versátil, abarca cerámica, telar y pintura. Conocer su obra es conocer su mundo interior.
No estudió literatura en la facultad, pero tuvo de maestros a Leonidas Escudero, José Campus y Rufino Martínez. Fue la organizadora de los encuentros de escritores en San Juan.
El imponente e icónico edificio fue construido por los jesuitas en 1750 y concluido muchos años después.