Mallea y su esposa, ¿una princesa huarpe?

El capitán Juan Jufré, fundador de San Juan de la Frontera, llegó a estas tierras con un puñado de hombres que lo secundaban, entre ellos, Juan Eugenio de Mallea, quien según algunos historiadores se casó con una princesa huarpe, la hija del cacique Angaco, la Ñusta.

En los últimos años este relato se puso en duda al no existir documentos que avalen el origen de Teresa de Asencio, la supuesta princesa huarpe.

En “Recuerdos de Provincia”, Domingo Faustino Sarmiento afirmaba que “Mallea, casado en San Juan con la hija del cacique de Angaco, que se llamó doña Teresa de Asencio, le trajo en dote muchos pesos de oro y diole varios hijos”.

Eso se decía entonces y eso se siguió diciendo.

Así lo menciona Horacio Videla en su “Historia de San Juan”: “Juan Eugenio de Mallea, a su vez hidalgo de noble cuna, se casó al año siguiente de la fundación de San Juan con la hija del cacique Angaco.

Encarnó el espíritu igualitario desprovisto de prejuicios sociales de tanta proyección futura en el lugar, al desposarse con la Ñusta india ya lo hacía con su par”.

Juan Jufré, fundador de San Juan.

Hombre de Jufré

Un informe realizado por Norberto Eduardo Tordini D’Elía y publicado por geneanet.org, señalaba que “…se dispuso Jufré a poblar en la provincia de Tucumán, Caria o Cariagasta (Calingasta), de acuerdo a sus obligaciones.

Fue bien recibido por el cacique de los huarpes, Angaco, con una de cuyas hijas, convertida tiempo más tarde con el nombre de Teresa de Asencio, se casó Juan Eugenio Mallea, segundo jefe de la expedición.

Narciso Binayán Carmona, en su Historia Genealógica Argentina (Emecé 1999), citó a la investigadora Josefina Aubone Deheza de Ossa quien sostenía que eso no era cierto y que se trataba de mujer española con familia inmediata en Valdivia, como sostenía Espejo”.

Binayán Carmona aseguró que “no existe, en suma, prueba alguna no ya de época sino anterior a 1850, conforme con autorizados eruditos sanjuaninos, para establecer que la Teresa de Ascencio, casada con Mallea antes de 1570, fuera india en todo o en parte, huarpe o de cualquier otra tribu o nación”.

También se decía que cuando fue bautizada la Ñusta, en 1563, le fue impuesto el nombre Teresa de Ascensio, por haber recibido el sacramento el día de la Ascensión.

El análisis de Mendoza

El historiador sanjuanino Edgardo Mendoza también escribió respecto a la historia de Mallea y la Ñusta*.

“Antes de 1570, se habría celebrado el casamiento producto del cual habrían nacido varios hijos. Para esa época la única habilitada para celebrar bautismos y casamiento era la Iglesia Católica, el Estado no tenía entonces ningún tipo de intervención.

Por esta razón, para afirmar históricamente estos datos es imprescindible aportar los registros parroquiales de ambas ceremonias (bautismo y casamiento) cosa que hasta el momento nadie lo ha hecho.

Va ser difícil realizarlo porque durante sus primeros años nuestra ciudad no contó con ningún sacerdote”, señalaba Mendoza.

Según Mendoza, las tierras que adquiere Mallea en San Juan no fueron entregadas por el cacique Angaco sino por merced real en virtud de los servicios prestados a la corona española.

“…y en virtud de los reales poderes que para ello tiene el gobernador de este dicho reino, hago merced al dicho Juan Eugenio de Mallea de doscientas cuadras de tierra, a una legua de esta dicha ciudad, adonde atraviesa la acequia del inca, y de dicha acequia debajo de la una parte.

Y otra que se mida por donde hubiera tierras de provecho para sembrar hasta que se cumplan las dichas doscientas cuadras”, señala el documento en cuestión.

Luego agregaba Mendoza que el historiador chileno José Luis Espejo sostenía que Teresa de Asencio nació del otro lado de la cordillera, en Valdivia, siendo parte de la familia Asencio-Guerrero, fundadores de la ciudad.

Teresa, según la ilustración del libro de César H. Guerrero.

Chilena?

“Si esta afirmación es respaldada por pruebas documentales podríamos decir que la Sra. de Mallea poca sangre india tendría en sus venas”, destacó Mendoza.

Pero, fiel a su espíritu reaccionario, fue más allá y señaló: “Del Cacique Angaco o de Angaco, no hay absolutamente ninguna prueba de su existencia, aunque en el sentimiento popular tuvo un rol romántico y poético en nuestro crecimiento.

La leyenda es una respuesta hermosa, la historia es otra cosa y es importante que no confundamos literatura con historia”.

La página ancestors.family publica que Juan Eugenio de Mallea nació en 1535, en Eibar, Gipuzkoa, País Vasco, España. Su padre, Juan de la barreda Estrada y Guerrero de Mallea, tenía 26 años y su madre, Elvira Teresa De Mallea, 23.

Mallea fue segundo capitán de Jufré, regidor del primer cabildo, alcalde y alférez real de la ciudad.

“Se casó Teresa de Ascencio el 20 de mayo de 1563, en San Juan, Argentina. Eran padres de al menos 4 hijos y 4 hijas. Murió en 1608, en San Juan, Argentina, a la edad de 73 años”.